Después de neutralizar el autogolpe de estado, organizado
por el mismo Erdogan, los grupos de radicales islamistas están comenzando a
aterrorizar a personas que no son afines a los designios del nuevo amo de Turquía. Dos casos escalofriantes están sacudiendo a
una minoritaria parte de la sociedad turca. El primero fue la decapitación de un
inofensivo refugiado sirio. Su cruel
asesinato tenía como única excusa, su condición de ser homosexual. Para sus asquerosos asesinos, esto era más que
suficiente para darle tan atroz muerte. El
segundo caso es aun más repugnante, ésta vez la víctima era una transexual
llamada Hande Kader de 22 años. La
muerte de esta segunda víctima es algo indescriptible, sencillamente la
mutilaron y la quemaron viva. Los
miserables asesinos con esta abominable acción, seguramente estarán demostrando
su religiosidad fanatica, digo yo, o su supuesta hombría. Lo grave de estos sucesos, es que ni la policía,
ni la opinión pública mayormente islamista, se sentirán perturbadas.
Siempre he pensado, que aquellos que cometen asesinatos
contra personas, por sus orientaciones sexuales, o ideologicas, deberían ser
arrojado al mar, eso sí, como dijo Jesucristo, con una gran piedra de molino en
su cuello.
Comparto tu juicio y tu preocupación por los sucesos que se están dando en Turquía. Y el principal responsable de todo, el nuevo déspota, que ha actuado así, para hacerse con el Poder absoluto.
ResponderEliminarSaludos
Turquia esta cambiando para peor.El nuevo sultan es un peligro no solo para su pais,nosotros los europeos tenemos que tener cuidado si viajamo a Turquia ,saludos,
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