Otra vez nos llaman a votar los que prostituyen la Democracia.
El ciudadano como es de esperar, será
manipulado con toda clases de subterfugios y promesas a cual más irreales. Ésta vez dicen los padre de la patria que el
voto es decisivo. Se supone que será para que la pasta y el chollo de vivir sin
dar un palo al agua puedan continuar para las legiones de familiares, enchufados
y amiguetes, y que el invento de votar cada cuatro años no se vaya a la mierda. Yo opino que el ciudadano debería tener algo
de sentido común, y propinar un sonoro bofetón en el rostro de los cuatro
aspirantes a gobernar a la vieja nación Ibérica. La forma más fácil de ese simbólico bofetón
sería aprovechar los calores de Junio para darse un homenaje marchando a una
buena playa, luego más tarde dar cuenta de una buena mariscada. Digo todo esto por la simple razón de que lo
mismo esta vez tampoco llega a formar un gobierno algo decente. Lo dicho, tenemos
la oportunidad increíble de dejarles con sus patéticas batallitas y sus
cambalaches de feria, digo yo.
Pues no sería mala opción, Agustín, sobretodo si vives en una población como la mía, donde sólo hay seis papeletas diferentes... y de las seis, cinco, con un simple roce, pueden hacer que un rayo celestial caiga partiéndome en dos.
ResponderEliminarUna tragedia, vamos.
Esperemo que ese ese malefico rayo,vaya en direccion opuesta,jejeje.En serio la abstencion es tan democratica como el voto en blanco,un abrazo,
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