CATALUÑA - LLUÍS COMPANYS, VERDUGO Y VICTIMA

Dentro de los iconos que adornan los delirios separatistas de la casta política catalana, el caso en donde la escoria separatista sacó más partido fue sin ninguna dilación con la fraudulenta figura de Lluís Companys.  Pues sobre este vil personaje se ha empleado el Botafumeiro sin ningún reparo.  Más o meno es tratado como una paloma de la paz para el fanatismo enfermizo de los separatistas catalanes.  La figura de este elemento es la más valorada.  Se podría decir que faltó poco para que se le canonizara.  Eso sí, parques, jardines, calles y plazas, y hasta un estadio llevan su infausto nombre.  Claro que a los chiquillos que estudian en los colegios de Cataluña, sólo se les enseñaran una porción pequeña y falsa de la historia de este indigno personaje.  La otra parte está guardada con sutileza en el pozo profundo del olvido.  Así cuando ese crio tenga 18 años, el letal veneno de la mentira separatista ya se habrá instalado en su manipulado cerebro.

Como este joven, serán miles y miles los que tendrán en sus retinas la imagen santificada de Lluís Companys, pues el dogma separatista les inculcó que su amado presidente luchó por la libertad sagrada de Cataluña y como consecuencia de su derrota, fue fusilado por el Ogro Franquista.  Como esta historietas hay muchas más en esta cansina región española.  Pero todos sabemos que la verdad fue otra.  Ésta es que Lluís Companys entregó todos los resortes del poder a las milicias comunistas, anarquistas y separatistas en Julio de 1936.  Como consecuencia de este cobarde acto, la noble y católica región catalana sé vio cubierta con la sangre de miles de ciudadanos, en el que su único delito era ser católico.  Así fue como monjas, sacerdotes y seglares fueron inmolado en una terrible persecución religiosa ante la pasividad y connivencia criminal del gobierno de la Generalitat de Cataluña, en donde Lluís Companys era su presidente.  Al final el Gobierno Republicano con sede en Madrid puso coto a tanto desmanes en el verano de 1937.  Una vez perdida la guerra sin casi oponer resistencia al avance de las tropas del general Franco, el señor Companys como muchos otros, tomó la de Villadiego refugiándose en Francia.  Pero poco le duró la fuga, púes la odiada Gestapo le detuvo en 1940 y le entregó al gobierno español.  Todos sabemos lo que le ocurrió. Una Corte Militar le halló culpable de su criminal y turbia trayectoria como presidente de la Generalitat.  Fue fusilado un 15 de Octubre de 1940.  Así de esta forma fue como la escoria separatista pudo tener al fin a su perfecto martir.  Pues, no señores, no era asi.  Pues sí, fue victima al ser fusilado.  También fue verdugo al consentir las matanzas que asolaron la noble tierra de la región catalana.  Púes hay que recordar que el 23 de Julio del 1936 y por orden expresa de Companys, Esquerra Republicana de Cataluña creó el Comité de Milicias Antifaxistas, que seria la encargada de administrar la cruel represión a cargo de los milicianos de los partidos de izquierdas, que provocaron hasta Abril de 1939 la terrible cifra de 8,000 asesinatos.  Todo esto ocurrió en una de las regiones mas católica de España, que dio a catalanes tan ilustres como Jaime Balmes y Jacinto Verdaguer, y si me permiten a  San Antonio María Claret.