NI TRIBUNAL CONSTITUCIONAL, NI POLLAS EN VINAGRE

Dice el refrán, que no hay peor ciego que el que no quiere ver.  Éste dicho le viene muy bien al botarate de Artur Mas, como si no hubiera sido más que suficiente el negativo resultado del Referéndum separatista en Escocia, para dar marcha atrás y salir con algo de decencia del embrollo que ha montado.  Todo lo contrario en un acto de infinita soberbia, desafía al Tribunal Constitucional, que le manda que pare la ilegal consulta.  Es entonces cuando este nuevo Mesías de causas inventadas, se tira a la piscina sin agua, y dice que sigue con su huida hacia adelante.  Eso sí mientras tanto, el presidente de España cual un avezado avestruz, en vez de decidir de una puta vez cortar por lo sano, aplicando todo el peso de la ley, sobre la cabeza de este aprendiz de Mussolini, que en este caso es Arturito Más.  ¿Qué tenemos?  Pues, nada de nada.  Tanto el PP, como el cadavérico PSOE, miran al tendido esperando con resignación la fecha fatídica del 9 de Noviembre.

En fin, esto no lo para ya nadie, bueno, una Bandera de La Legión sí.  Claro que muchos diran, ¿qué pensaría de un acto de este calibre, las muy corruptas y endeudadas naciones de esta decadente Europa?  Yo creo que eso es lo de menos. Púes si somos una nación libre y soberana, el Gobierno está en su derecho de aplicar sus leyes.  Luego ante este desafío de romper a la nación española, nada de paños calientes, púes eso, ni Tribunal Constitucional ni pollas en vinagre, lo dicho una Bandera de La Legión, y que Dios reparta suerte.