Pocos pensadores, poetas y filósofos son capaces de llegar a lo más profundo de nuestras almas, de una manera tan sencilla como Tagore. Sus versos brotan de una manera pasmosa, y el lirismo que emana es una verdadera sinfonía para nuestros sentidos. En mi modesta opinión su obra está impregnada de una honesta espiritualidad. El mensaje de Tagore es limpio sin necesidad de envolverte en fútiles demagogia, lo contrario de otros pensadores que solo buscan un proselitismo sin sentido. En Tagore no hay espacio para el subterfugio. Tagore antes que nada es un verdadero torrente de poesía que se nutre de las fuentes del hinduismo y de las aguas del Ganges. Muchos intelectuales de Occidente vieron a Tagore como la quintaescencia de lo que representa la poesía mistica, Otros le han visto como el Cristo, que alguna vez soñemos en nuestra idílica adolescencia. Pará mí tanto Tagore, Sócrates y Jesús representan la Trinidad que llevaron el mensaje del Amor a los hombres. Tagore fue más que un poeta. Él era un pensador, en sí un alma noble. W.B.Yeats escribió sobre Tagore, “Éstos liricos muestran en su pensamiento un mundo que he soñado toda mi vida.”
Les dejo con este poema que para mí es tan hermoso como una pieza de Juan S. Bach:
El último viajeSé que en la tarde de un día cualquiera
el sol me dirá su último adiós,
con su mano ya violeta,
desde el recodo de occidente.
Como siempre habré musitado una canción,
habré mirado una muchacha,
habré visto el cielo con nubes
a través del árbol que se asoma a mi ventana.
Los pastores tocarán sus flautas
a la sombra de las higueras,
los corderos triscarán en la verde ladera
que cae suavemente hacía el río;
el humo subirá sobre la casa de mi vecino...
Y no sabré que es por última vez...
Pero te ruego, Señor: ¿podría saber antes de
abandonarla, por qué esta tierra me tuvo entre sus brazos?
Y, ¿qué me quiso decir la noche con sus estrellas?
Y mi corazón, ¿qué me quiso decir mi corazón?
Antes de partir, quiero demorarme un momento, con el pie
en el estribo, para acabar la melodía que vine a cantar.
¡Quiero que la lámpara esté encendida para ver tu rostro, Señor!
Y quiero un ramo de flores para llevártelo, Señor,
sencillamente.
R. Tagore
Few thinkers, poets and philosophers are able to reach the deepest regions of our souls, in such a simple way that Tagore had achieved. His verses flow in such an amazing way, and the lyricism that emanates from them is a true symphony for our senses. In my modest opinion his is filled with an honest spirituality. The message of Tagore is clean with no need of going round in circles of futile demagoguery, which is the opposite of other thinkers who aim towards propaganda without any sense. In Tagore there is no space for subterfuge. Tagore, above all else is a true torrent of poetry torrent that has been nourished by the sources of Hinduism and the waters of the Ganges. Many intellectuals of the West saw Tagore as the quintessential representation of mystical poetry. Others have seen him as Christ, that sometimes we dream about in our idyllic adolescence. For me, Tagore, Socrates and Jesus represent the Trinity that had sent the message of Love to mankind. Tagore was more than a poet. He was a thinker, and in him resides a noble soul. W.B.Yeats wrote about Tagore, “These lyrical verses that emanate from his thoughts show a world that I have dreamed about all my life.”
I leave you with this poem that for me is as beautiful as a composition of Juan S. Bach:
The Last Journey
I know that in afternoon of one day
the sun will say its last good bye to me,
with its already violet hand,
from the corner of the West.
As always I will have whispered a song,
I will have watched a girl,
I will have seen the sky with clouds
through tree that leans towards my window.
The shepherds will play their flutes
in the shade of the fig trees,
the lambs will wander on in the green slopes
that it falls gently to the river;
the smoke will rise from the house of my neighbor…
And I will not know that it is for the last time…
But I make this request to you, Lord:
could you let me know before I leave,
why did this earth hold me in its arms?
And, what does the night, filled with stars, want to say to me?
And my heart, what does my heart want to say to me?
Before starting off,
I want to be delayed for a little while,
with my feet in the stirrups,
to finish the melody that I came to sing.
I would like the lamp be lit so that I can see your face, Lord!
And I would love to present you with a bunch of flowers,
Lord, simply so.
R. Tagore
Confieso que no leí nada de este hombre. La poesía muy bonita desde luego.
ResponderEliminarSaluditos y Feliz Año Nuevo.
Lamento no poder comentar nada sobre Tagore porque de joven leí algo suyo y me pareció un lírico a lo San Juan de la Cruz español.
ResponderEliminarY como no soy amante de la POESIA, sí de la LITERATURA restante, no me puedo posicionar al respecto.
Cordiales saludos.
No es mi género literario favorito, pero me gusta la poesía que es sencilla de comprender sin dejar de ser profunda,sin barroquismos ni pomposidades innecesarias,y Tagore es de una sensibilidad tan honda como cercana, siempre me gustó.
ResponderEliminarCordiales saludos
Agustín a mi sus textos , siempre me ha parecido un poco complicados.
ResponderEliminarNo conozco la poesía de Tagore, pero esta que nos has traido me parece preciosa y cercana.
ResponderEliminarNo me gusta Tagore.Demasiado alambicado para expresar pensamientos que son básicos.
ResponderEliminarCuanto acierto por tu parte en estos tiempos de tribulaciones henchidos, acercarnos estos sencillos sentimientos.
ResponderEliminarLei a Tagore en mis años de estudiante sobre traduciones de Juan Ramon Jimenez y Zenobia Camprubì y recuerdo muchas de sus frases.
ResponderEliminar*La verdad no está de parte de quién grite más.
*Hacer preguntas es prueba de que se piensa
un fuerte saludo
fus
meagrda mucho pues deseo ve el mundo tan cesillo y hermoso perdoname ,un saludo
ResponderEliminarMUJER, no eres solamente una creación de Dios. Los hombres te están creando eternamente en la hermosura de sus corazones, y sus ansias han vestido de gloria tu juventud.
ResponderEliminarPor ti, el poeta labra su tela de oro imaginario. El pintor regala a tu forma, día tras día, nueva inmortalidad. Para adornarte, para vestirte, para hacerte más preciosa, el mar da sus perlas, la tierra su oro, su flor los jardines de estío.
Mujer, eres mitad mujer, mitad sueño.
Es una pasada, no me digáis... Hay poemas más profundos, que requieren de una especial sensibilidad espiritual para entenderlos. "Lo que se ignora, se desprecia" A. Machado.