La locura de la destructiva cultura Woke está llegando a límites que superan a lo distópico y lo surrealista. Para ilustrar lo que digo, nada mas acertado que es enterarse de lo que ha dicho la juez de la corte Suprema de Canada. Esta decerebrada que se llama Sheilah Martin redacto el auto que revocaba una sentecia sobre un caso fragante de violación. En donde ningunos de los implicados eran transgénero, la satanica juez con toga consideró que el uso de la palabra mujer era algo desafortunado, y podia crear confusion. Para esta vivora con toga, lo mas adecuado es decir una persona con vagina, en vez de mujer. No cabe ninguna duda que esta woke vive en un mundo paralelo. Por desgracia hoy el nihilismo es la panacea del mundo Occidental, aunque la catarsis nuclear está a la vuelta de la esquina, digo yo.
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