CATALUNYA – CAPITAL: GINEBRA, JAJAJA

Este Domingo 25 de Noviembre los ciudadanos de la región catalana tienen la opción en las Elecciones Autonómicas de decirles a la cuadrillas de mafiosos y corruptos dirigentes de Convergencia I Unión, en especial a Artur Mas Y Jordi Pujol, que se acabó de utilizarles como escudos contra el resto de los españoles.  Púes ahora la fuerza del voto responsable tiene la palabra.  Ellos, los ciudadanos catalanes saben con quien se juegan los cuartos.  Sería masoquista y estólido que dieran sus votos a un partido en donde su cúpula dirigente tiene su dinero en las cuentas de un banco de Suiza, en concreto en la ciudad de Ginebra.  El ejemplo más despreciable le correspondería al Clan Pujol, sí, la Honorable Familia que suele utilizar el victimismo y las mentiras más burdas para manipular a sus votantes.  Claro que ahora se descubre que de respetable nada de nada, púes el Clan Pujol tiene amasada una cuantiosa fortuna en un banco de Ginebra, que se elevaría a más de 137 millones de Euros.  Me pregunto y ustedes se dirán los mismo, ¿De dónde diablo sacaron ese dineral?

Ya ven, tanto llenarse la boca de que si España nos roba, y resulta que si hay algún ladrón lo tienen en su propia casa.  ¿Qué cosas, no?  Ésta familia de comunión diaria se supone, son los más inmorales personajes que ha dado esta noble región de España.  ¡Qué diferencia con los nobles catalanes como Josep Pla Jacint Verdaguer!   Otro ejemplo despreciable seria el nuevo rey del mambo, el ínclito Artur Mas, al enterarnos que su fenecido padre dejó una abultada cuenta en un banco de Liechstein.  Ese dinero era de las comisiones ilegales del caso Palau de la Música.  En fin, el pueblo les podría dar la mayoría absoluta.  Y como recompensa Convergencia I Unión les podría programar unas vacaciones a sus sumisos votantes, digo yo, para que pasen una temporadita en Acapulco.  Púes allí los Pujol tienen un hotel de súper lujo.  Eso sí, no se olviden, señores de Convergencia i Union, que si alcanzan la tan ansiada Independencia, que los chiquillos aprendan en las escuelas a decir, “Catalunya, capital Ginebra.”  ¡Ojo!  ¡No se equivoquen y digan Barcelona!  ¡JaJaJa!